El intendente de Lanús, Julián Álvarez, informó anoche que inició «las actuaciones penales correspondientes» porque, dijo, «en la medianoche del domingo (la 0 hora), la Policía de la Ciudad (de Buenos Aires) cortaba los ingresos y egresos al Puente Olímpico en territorio del distrito de Lanús».
El parte de prensa explica que Álvarez «y su secretario de Seguridad, Sebastián Castillo, identificaron que la Policía» porteña cortaba los accesos y egresos del Puente mientras ambos funcionarios «supervisaban el operativo de saturación vehicular en el barrio Villa Jardín», en Lanús Oeste, desde donde parte el moderno paso vehicular.
«La fuerza comandada por Diego Kravetz (la Policía de la Ciudad de Buenos Aires) cometió un delito, llevando adelante en Lanús un operativo ilegal e inconsulto. Por eso me comuniqué con las autoridades judiciales e inicié las actuaciones penales correspondientes», explicó Julián Álvarez, que no aclaró si inició ese accionar legal contra el secretario de Seguridad porteño, contra ese Ministerio o contra el gobierno comandado por Jorge Macri.
El comunicado añade que «el accionar de Kravetz», al que calificó de «ilegal y desprolijo, se suma a lo acontecido durante el reciente robo sufrido por el secretario del Concejo Deliberante de Lanús Gabriel Sandoval, cuando la Policía de la Ciudad no dejó actuar a la Policía Bonaerense, durante la persecución de los delincuentes que se dirigían hacia la Capital Federal, lugar donde residían».
Además, Álvarez acusó a su adversario en las pasadas elecciones a intendente de Lanús de que «envió a sus militantes a acuartelarse en la Base Operativa de Seguridad Ciudadana de Lanús para que los agentes no pudieran salir a patrullar, 24 horas después de que el intendente había comunicado un aumento salarial del 95 % para todo el personal de la fuerza».
“Le pedimos a Diego Kravetz que sea responsable y que deje gestionar obierno que fue elegido por el voto popular de Lanús”, enfatizó el intendente.